Tanto la Red de Acción en Agricultura Alternativa (RAAA) como la Asociación Peruana de Consumidores (ASPEC) han dado su completo respaldo a la Comisión de Pueblos Andinos del Congreso de la República, que aprobó por unanimidad el primer artículo de la Ley que declara la moratoria en relación a los Organismos Vivos Modificados (OVM ), prohibiendo su ingreso al territorio nacional con fines de cultivo y/o crianza de cualquier índole, incluidos los organismos acuáticos, a ser liberados en el ambiente, en un plazo de 15 años.
No obstante, debe tomarse en consideración en la moratoria, lo que sigue: "exclúyase de la aplicación de la presente Ley, los Organismos Vivos Modificados (OVM) destinados al uso en espacio confinado para fines de investigación.." Sin embargo, las entidades del epígrafe señalan que este artículo no debería contemplarse, ya que excluir a investigaciones con OVM en campo confinado puede ocasionar fugas de dichos organismos, lo que representaría un nivel de riesgo latente por inadecuada aplicación de medidas de bioseguridad y si este transgénico contamina la cadena alimentaria, representa riesgos para la salud humana.
En el artículo 4to sobre promoción de la investigación científica al no prohibir la investigación se permite que a través de la "información confidencial del negocio", se introduzcan transgénicos provocando contaminación. En el Perú el confinamiento de las investigaciones no es controlable. Por tanto este artículo debe desaparecer.
Continuando con el art. 4to, la situación ideal es que se declare al Ministerio del Ambiente (Minam) la autoridad en temas de bioseguridad y no sólo punto focal, porque en el tema de las competencias está la traba para seguir avanzando en la implantación del Protocolo y en la construcción de un verdadero sistema de bioseguridad que solo es posible con una entidad no comprometida con el tema de la investigación con biotecnología moderna.
Antonio Brack, Ministro del Ambiente dice que países europeos y del mundo han declarado moratorias al ingreso de estos productos transgénicos, entre los que se cuentan Suiza, Italia, Alemania, Hungría, Irlanda, Canadá, Africa y Japón.
