En esta última semana de setiembre, se realizó en New York, la Asamblea General de la ONU versión 64. Los temas centrales del encuentro son el calentamiento global, la crisis económica, la proliferación de armas nucleares y el tema de Honduras.
En opinión del calentamiento global, surge el cuestionamiento, si es que se podrá reducir la contaminación sin golpear la economía; y aunque algunos son pocos optimistas y nada auspiciosos para con el planeta, porque consideran que las alternativas son demasiados caras, otros afirman, categóricamente que sí. Que la transición gradual en la implementación de la energía verde tendrá un costo manejable. Haciendo una proyección al 2020, según análisis económicos, el costo se acercaría a 175 dólares por hogar.
Sobre la crisis económica, se advierte, que será EE. UU. el país, que saldrá primero, seguido de China y luego de Europa. Latinoamérica tendrá una recomposición casi inmediata conforme estos países vayan recuperando su nivel adquisitivo. Es más, países como el Perú, han crecido en plena crsis y, donde su presidente, Alan García, exigió a la Organización de Estados Americanos, hacer un llamado enérgico a los gobiernos de la región, incluyendo al peruano, para frenar el creciente gasto en armamento.
En cuanto a la proliferación de armas nucleares, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, expresó su voluntad de actuar contra los desafíos internacionales, lo hizo en clara alusión a la carrera armamentista de Irán y Corea del Norte. Aquí fue secundado por el estrenado presidente ruso Dmitry Medvedev. ello frente a la inacostumbrada presencia del líder libio, Muammar Ghadafi, quien ya lleva 4 décadas en el poder y, que tuvo una participación algo accidentada, al traspapelar su propio discurso, no sin antes cuestionar al Consejo de Seguridad y pedir el retiro de EE.UU., Gran Bretaña, Francia, Rusia y China.
Respecto a la crisis en Honduras, la presidenta de argentina Cristina Fernández reclamó "una estrategia multilateral fuerte, precisa, que haga retornar la democracia a Honduras y el respeto a los derechos humanos y que asegure que haya elecciones libres y democráticas, que solamente se pueden hacer en el marco del respeto a la Constitución".
